¿Por qué una pedagoga?

Porque como dice la palabra, que viene del griego, paidos, niño y ago: guiar…

Mi especialidad es observar y guiar por el camino que cada uno necesita para llegar al éxito.
No soy mágica. Soy buena en lo que hago. Con mucha capacidad para detectar por el feedback, como se siente un niño, adolescente. Si necesita hablar, si es victima de acoso escolar, si tiene cualquier carencia emocional…ahí si es necesario me pondré en contacto con tutores, padres…teniéndoles siempre informados…
Porque cada uno va a encontrar un lugar cómodo, alegre, donde desahogarse, donde ser «él/ella mismo/a». Donde descubriremos sus puntos débiles y sus puntos a reforzar, para motivarse, desarrollarse y mejorar en todas las asignaturas. A través de trucos, con el material adaptado que cada uno necesite.

La metodología es única, una mezcla de Montessori, del método Waldorf y de mi experiencia…pero al final no es una concreta. Es la que cada uno necesite. Yo me adapto al educando, no él a mi. Ya se tienen que adaptar el resto del día a la sociedad, colegios, academias…normas, casa… Salimos de ahí, y buscamos como se siente el alumno. Y desde esa libertad de ser el mismo, trabajamos..
Ayudo a hacer los deberes, sí. Pero si veo que es necesario parar y volver a repasar contenidos del curso anterior, lo haremos. No se trata de rellenar huecos y completar fichas, sino de aprender. Y de comprender.
No dejo que los niños sigan estudiando en euskera o en ingles si no comprenden lo están leyendo perfectamente. Nos tomaremos nuestro tiempo. Pero lo haremos desde la pedagogía. Un proceso de aprendizaje completo.